La hipertensión arterial es una de las principales causas de accidente cardiovasculares y, las enfermedades cardiovasculares, son la principal causa de muerte en la mayoría de los países del mundo.
Debido a la gran incidencia de la hipertensión en la población mundial y a su incremento incesante a causa de los inadecuados hábitos de vida actuales, es imperante que conozcamos los efectos del estilo de vida sobre la presión arterial de nuestro organismo.
Debido a la gran incidencia de la hipertensión en la población mundial y a su incremento incesante a causa de los inadecuados hábitos de vida actuales, es imperante que conozcamos los efectos del estilo de vida sobre la presión arterial de nuestro organismo.
La presión arterial se define como la fuerza ejercida por la sangre sobre cualquier área o superficie de la pared arterial. Sus causas pueden ser muchas y la predominante aún no se conoce, pero si se sabe que una vez que poseemos la enfermedad su control se facilita mucho si adoptamos ciertos hábitos en nuestra vida.
Entonces, la primera medida que se recomienda a una persona que padece hipertensión para reducir las cifras de tensión arterial es una modificación en su estilo de vida.
A continuación les presento los cambios que se proponen y su efecto sobre la presión arterial:
Reducir el peso corporal: Se recomienda mantener un peso corporal normal, ya que se puede disminuir con éste cambio entre 5 y 20 mmHg de presión por cada 10 kg de peso corporal perdido
Llevar una adecuada alimentación: Se aconseja adoptar una dieta rica en frutas, vegetales, productos lácteos descremados y con bajo aporte de grasas saturadas. Éste cambio disminuye entre 8 y 14 mmHg de presión sanguínea.
Disminuir el consumo de sodio: Ingerir como máximo 2,4 gramos de sodio por día permite reducir entre 2 y 8 mmHg la presión arterial.
Realizar actividad física: La práctica de actividad física regular, al menos 30 minutos diarios, ayuda a disminuir entre 4 y 9 mmHg la tensión arterial de las personas hipertensas.
Suprimir el consumo de alcohol: Se recomienda no ingerir alcohol con el objetivo de reducir la presión arterial entre 2 y 4 mmHg.
Como podrán ver, éstos pequeños hábitos, fáciles de adoptar y continuar, permiten controlar la presión arterial y evitar su descompensación y posterior lesión cardiovascular.
Además, las modificaciones antes enunciadas, no sólo permiten controlar de manera fácil la hipertensión, sino que contribuyen a mejorar la salud en general.
Llevar una vida sana y activa ofrece muchos beneficios, pero saber en concreto sus bondades puede estimular, en este caso a las personas hipertensas, a introducir pequeños cambios en sus vidas que mejoren la salud de su organismo.