Ejercicio físico e hipertensión
Si bien ayer hablábamos de los motivos por los que una persona podría entrar en los grupos de riesgo de padecer hipertensión, hoy le toca el turno a la mejor arma que tenemos a primera mano: El ejercicio físico.
Según la Asociación Americana del Corazón las personas que realizan ejercicio físico tienen entre un 35 y un 50% menos de riesgo de padecer patologías coronarias (enfermedades del corazón) o hipertensión arterial, ¿Te parece todavía insuficiente motivo? Pues ahí te dejamos algunos más relacionados con la misma:

Control del sobrepeso
Disminución de otras patologías relacionadas con la hipertensión
Favorece el funcionamiento articular y muscular.
Reducción de stress y ansiedad


Entonces, ¿cuáles son las pautas a seguir en el ejercicio físico para hipertensos? En este caso el ejercicio aeróbico moderado es el de mayor practicidad al respecto, tanto al aire libre (paseo) como en el gimnasio (cinta de correr, bicicleta estática, elíptica) siempre con la guía de un buen pulsómetro.
Por otra parte, será casi obligatorio evitar ciertos movimientos de fuerza, como levantar peso por encima de la proyección de la cabeza o los ejercicios isométricos (muy habituales, por ejemplo, en el método Pilates)